06 Ago Beneficios del Contacto con la Naturaleza

El Ayurveda nos guía hacia todo lo que hace que la vida merezca la pena vivirla. El logro de la salud perfecta a través del Ayurveda está relacionado directa y proporcionalmente al estilo de vida y al estado de ánimo adecuado. A medida que mejora la salud, gracias a los cambios de hábitos se establece un estado de paz mental,  y la vida se expande.

El Ayurveda es producto de una civilización profundamente arraigada a la madre naturaleza Los antiguos rishis o sabios que transmitieron los conocimientos del Ayurveda, sabían que somos parte de ella y subrayan la importancia de la medicina preventiva, que se consigue desarrollando el sistema inmunológico propio de cada individuo, para combatir todas las posibles infecciones. A través del estudio del Ayurveda se llega a entender que nosotros somos los responsables de las enfermedades de nuestro cuerpo y, por lo tanto, estas no son incurables.

La naturaleza (la nuestra y la que nos rodea) es sanadora, y es tan generosa con nosotros como nosotros lo seamos con nosotros mismos y con los demás. La naturaleza está viva, somos parte de ella y en ella interactuamos seres humanos, animales, plantas y microorganismos esenciales para la vida. Si nos detenemos a pensar nos daremos cuenta de que somos una expresión de la conciencia (Purusha que se manifiesta) viva que es universal en toda la Naturaleza, donde todo lo que existe está formado por los cinco grandes elementos del universo, por lo tanto todos estamos unidos en una sola conciencia pura (Purusha- Dios- Energía creativa). Cuando nos alejamos de la naturaleza verde y viva, desencadenamos un proceso de desequilibrio físico y emocional que nos aleja de nuestra naturaleza espiritual y que es el origen de toda enfermedad física y/o mental, porque la naturaleza es parte de la fuente de nuestra existencia.

Qué beneficios te aporta entrar en contacto con la Naturaleza?

• Conciencia de los cambios: La vida es un constante fluir, todo es una continua mutación. Nada perdura en el tiempo. También te das cuenta que somos eternos, porque la vida permanece de forma positiva y abundante.
• Paciencia: Si observas a la naturaleza te darás cuenta que tiene un ritmo perfecto, y así es nuestra vida, los momentos en los que nos ocurren las situaciones y los cambios siempre son perfectos, al darte cuenta de esto aprendes a aceptar lo que cada día te trae la vida.
• Respeto: Aprendemos a respetar a todos ser vivo, desde una hormiga a un gran árbol, cada uno forma parte de un todo que se encuentra en un constante equilibrio sostenido por una inteligencia superior, la misma que nos sostiene a nosotros como seres humanos.
• Alegría: La belleza cambiante de la naturaleza impacta poderosamente en nuestros sentidos. La visión de las cosas bellas nos llena de alegría y esta emoción mejora el flujo del prana (energía vital) en nuestro organismo. Esto lo sabemos intuitivamente por nuestro deseo innato de estar cerca de la naturaleza. El contacto con la naturaleza sana y nos carga de conciencia.
• Quietud: Cuando estamos en la naturaleza, tomamos consciencia de los ritmos reales de otros seres vivos de la tierra, más pausados, y por imitación nuestra velocidad artificial baja de revoluciones. Esto nos ayuda a estar más presentes y atentos a todo lo que ocurre a nuestro alrededor.
• Estar presente: El contacto con la naturaleza nos mantiene presentes ante las maravillas de la creación de Dios, por lo que tu organismo comienza a secretar endorfinas y dopaminas producidas por la emoción de agradecimiento que sientes al estar vivo. Esto incrementa tu sensación de bienestar y felicidad. Es importante que aprendamos a distinguir nuestras emociones, porque ellas nos dirigen al tipo de pensamiento que generamos. La naturaleza nos regala un momento de respiro para indagar en nuestras emociones y pensamientos positivos.

Momentos ideales para entrar en contacto con la naturaleza

El atardecer y el amanecer que son las horas de Brahma (horas Vata relacionadas con Prana, Sattva y Mente) son ideales para establecer una relación íntima con la naturaleza que te rodea. Estas horas del día tienen una quietud, una ligereza, una luz y una energía especial, son momentos que te inducen con facilidad al contacto con tu verdadero Ser (meditación) y en el que es fácil sentir tu unidad con todos los seres. Somos una misma energía manifestada materialmente de formas diferentes.

Gracias a la naturaleza no sólo nuestro cuerpo se llena de vitalidad, sino que nuestra mente encuentra el equilibrio emocional tan afectado por nuestro estilo de vida cargado de estrés.

“Es un deber para ti toda práctica que realce tu respeto, gracia y confianza, y te dé paz mental, armonía y satisfacción.  La ciencia de mantenerse en alto.”  Yogi Bhajan