
10 Sep ¿Cómo puedes mantenerte sano?
La salud es un estado de orden, de bienestar o de equilibrio integral en cuerpo y mente, porque nuestra alma es siempre perfecta en existencia, conciencia y gozo (en esencia Sat-Chit-Ananda). La salud no es sólo la ausencia de enfermedad, es que podamos sentirnos uno con la vida desde lo más íntimo de la conciencia.
Como seres humanos siempre estamos buscando una dirección, una respuesta, una explicación a nuestros males, un diagnóstico para todo lo que nos ocurre en la vida. Todos queremos estar sanos y equilibrados en cuerpo y mente, porque sabemos que esto nos trae felicidad, pero para lograrlo necesitamos:
- Resilencia, que es la capacidad que tenemos de adaptación, en otras palabras, la capacidad que tiene una persona para superar circunstancias a lo largo de su vida.
- Flexibilidad, que es la capacidad de ajustar las normas a nuestras diferentes necesidades.
- Intuición, que es la escucha y la confianza que tenemos con nuestra sabiduría interna, porque el cuerpo envía todo el tiempo señales de conformidad o disconformidad, indicando el camino que debemos seguir.
La salud es un equilibrio dinámico, donde cuerpo y mente reaccionan y se adaptan a las energías y cualidades que están en continuo movimiento, y que interactúan en nosotros interna y externamente día a día. Por lo tanto, para que podamos estar y mantenernos sanos, tenemos que escuchar y respetar nuestro cuerpo y mente. Esto se logra con autoconocimiento, autonomía y control de uno mismo.
Desde mi opinión personal, para estar sanos debemos eliminar:
1) El miedo (raíz de todas las emociones negativas) a:
- La incertidumbre, que es común para todos porque lo más seguro que tenemos son los cambios.
- La muerte, porque somos seres de conciencia, puros y eternos, haciendo un camino que nos llevará al mismo destino, unos antes otros después, pero todos vamos rumbo a unir nuestra alma con el Espíritu.
2) El ego, libérate del principio de separación asumiendo una actitud de testigo ante todo lo que te ocurra en la vida (sé un espectador). Observa tus pensamientos y emociones sin juzgar. Escoge las emociones que te hagan sentir bien. Aprende a confiar en tu intuición, reconoce que el origen de tus reacciones emocionales no está fuera, sino dentro de ti. Cultiva el silencio, contacta con la naturaleza, vive periodos de soledad, medita, contempla, cuida tu entorno vibratorio, vive con sencillez, para que cada día el ego se haga más débil y te sea más fácil acceder a tu verdadera naturaleza (tu Ser).
Sabemos que nuestra mente precede al cuerpo físico y que gobierna a cada una de nuestras células, por lo que puede enfermarnos o sanarnos, todo depende de nuestra atención e intención, recordemos que es en ese sentido que la energía fluye. Una enfermedad es una oportunidad para reflexionar sobre las actitudes que tenemos frente a la vida. Si actuamos desde la conciencia, la raíz de la enfermedad (el ego) no puede dar fruto en nosotros porque no existe el conflicto que la alimenta.
Cuando estamos sanos nos sentimos felices y si nos mantenemos por un buen tiempo en ese estado cambiamos nuestra frecuencia vibratoria, acercándonos cada vez más al propósito de la vida, que es alcanzar la felicidad que te trae la conciencia de unión con Dios.
“Cuando la mente, el cuerpo y el espíritu están en armonía la consecuencia natural es la felicidad” Dr. Deepak Chopra